El discurso de un premiado, una gran responsabilidad

Estaba intentando recordar un fragmento que dije cuando recogí el premio del MovilFilmFest y no lo recordaba, sí, la memoria me falla, pero no es que me haga viejo creo que es de nacimiento, de pequeño me apunté a teatro para ejercitarla, intento fallido, lo que hice fue ejercitar la improvisación. El fragmento se me ocurrió en el avión de camino a Madrid mientras leía El efecto actitud quién me inspiró pocas horas antes de que me dieran el premio (ya sabía que me premiarían, es raro que un festival no te llame antes, necesitan que los premiados estén presentes).

Este era el fragmento relacionado con la temática del premio, «Vídeo no-guión» parecido a un documental:

Hay 3 tipos de personas:

1. las que cuentan la verdad.
2. los que miran como algunos se arriesgan a contar la verdad.
3. y los que no quieren que se sepa.

yo ya se cual soy ¿y vosotros?

No entiendo a los premiados que suben al escenario y felicitan a toda la familia y equipo y se van, en un momento que tienes a un montón de gente que la mayoría no te harían caso cara a cara y ahora te están escuchando atentamente ¿lo aprovechas para decir te quiero mamá o gracias fulanito? entiendo que es normal decirlo ¿pero sólo eso? bueno, hay casos exagerados como Almodovar que en los Oscars recitó todos los santos.

Creo que cuando en la vida vives un momento tan afortunado como que te escuchen muchas personas, tienes una gran responsabilidad.

Profundizando en el fragmento, está claro que en la vida no todo es blanco y negro, a veces es mejor no decir la verdad y otras que la verdad sea dicha por otros, pero no podemos empezar a filosofar si la gente no ha empezado a preguntarse la pregunta, al menos por mi experiencia, si en las conversaciones dices este fragmento te tomarán por loco, aburrido, pesado, busca problemas… pero en cambio si preguntas que pasará con el futuro de Ronaldinho todo el mundo teorizará, cuando nunca se han puesto a pensar en su propio futuro.

Y si, es muy fácil salir a un escenario y decirle a los demás que sean responsables como si tu fueras el único que lo es, cuando no es cierto, soy el peor ejemplo, pero precisamente por ser el peor ejemplo se que no es un buen camino, y no quiero que nadie lo siga por el bien de todos.

Soy como un fumador que le dice a otro que no fume.

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