Los jóvenes sólo piensan en masturbarse

problemas de jovenes

En mi infancia perdí tanto el tiempo con estas tonterías… esto es lo que he pensado al ver esta viñeta de Horacio Altuna publicado en El Periódico del 22 de septiembre de 2006 que me he encontrado al intentar ordenar los miles de papeles, revistas y periódicos que tengo en mi casa intentando hacerme espacio para vivir o entre todos me van a echar a la papelera de reciclaje.

La infancia es una etapa que no nos enseñan a aprovechar, hay excepciones imagino, pero yo no fui una de ellas y no recuerdo ninguna, la mayoría estamos pensando en ligar, si,si, a los trece años te imaginas haciendo el amor con la amiga de la clase que viene marcando culo haciendo poses de gimnasia en horas de matemáticas, o incluso te follarías (esta palabra, tal cual, con 13 años es normal pronunciarla entre amigos) a la profesora nueva y joven que al enseñar como hacer un ejercicio al compañero se agacha poniendo el culo en pompa para el gusto de todos los chicos que se masturbaban al fondo de la clase.

Imagino que la profesora masturbándose al ver un chico de 13 años sería un delito o algo por el estilo ¿no? ¿al inrevés está contemplado? porque a los 13 años no nos hubiera importado hacer sexo con la alumna y la profesora, en realidad cuando nos decían que existía una ley que no lo permitía nos puteaba porque nos cortaba aún más la escasa posibilidad de cumplir nuestros sueños humedos, ¿si yo quiero tirarme a la profesora y ella quiere porque tiene que ser delito? ¿que hay de malo? os parecerá exagerado, pero es que eso es lo que hay en nuestra mente de 13 años y pensándolo a mis 25 años poniéndome en la piel de mis 13 o 15 años, pues tampoco le veo lo malo aunque si te pones en la piel de la profesora te da como cosa, imagino por lo mal visto que está en nuestra cultura. A veces dicen que un niñó o niña de 15 años no tiene inteligencia para ser consciente de que es hacer el sexo, a mis 15 años te puedo asegurar que si lo sabía, y tampoco creo que la inteligencia o consciencia sea un argumento, hay personas de 25 años que son superadas por chicos y chicas de 15 años.

En mi escuela incluso existía un árbol en forma de campana que al ponerte debajo te cubría, varios grupos de chicos se metían allí se tumbaban uno al lado del otro formando un círculo y se masturbaban, cada uno con su miembro, mirando las hojas del árbol mientras esperaban ese momento de placer. Os juro que nunca lo hice, me daba mucha vergüenza que alguien me viera desnudo, pero la cosa va mas allá, amigos míos en vez de esconderse en el árbol se iban al final del patio, que era un campo de fútbol, se ponían uno delante de otro para taparse para que de lejos no se viera que estaban haciendo, masturbarse, no uno al otro, hasta ese punto no llegaron, lo más gracioso es que la escuela era La Salle aunque eso sucede en cualquier escuela, pero hace gracia que sea una escuela de hermanos donde los alumnos se masturbaban a diestro y siniestro incluso al final de la clase donde la última fila veías que de golpe todos tenían una mano en los pantalones, y para rizar el rizo incluso un alumno se atrevió a masturbarse en primera fila, hasta que la profesora le dijo que dejara de hacer lo que estaba haciendo debajo la mesa.

Pero para mi lo que me alucinó de verdad es tener que sacar a un amigo de mi casa porque se quería masturbar porque en su casa no podía, no encontraba el momento, sus padres lo tenían constantemente vigilado, no porque supieran que se masturbaba o que se quería masturbar simplemente porque eran unos padres demasiado atentos. Para mí ese día fue un choque, no pasa todos los días que tengas que sacar a rastras a un amigo por querer masturbarse en tu habitación, aunque fue gracioso, estábamos solos en mi casa y le saqué una revista Playboy que no recuerdo de donde la conseguí, imagino que me la dejó algún amigo que a su vez la había robado de alún quiosco, algo muy habitual sobretodo con cómics mangas X. En la Playboy había una mujer impresionante, desnuda con sus pechos al aire y un cuerpo perfecto, donde el retoque fotográfico no era costumbre como en la actualidad. Con toda normalidad le enseñé las fotos ya que estaba alucinado con el cuerpo de la mujer, ¿Cómo Dios consiguió realizar tal hazaña?, seguro que dedicó más de 7 días, y parece que a mi amigo le pareció digno de una masturbación, y sin mencionar palabra se bajó de golpe los pantalones, con lo que le pregunté ante mi sorpresa:

– ¿Pero que haces?

-Voy a hacerme una paja. (la primera vez en mi vida que escuché la palabra paja que es lo mismo que masturbarse, fue en el vestuario de una piscina y creía que se refería a la paja de la granja, por suerte la persona que la pronunció especificó que significaba hacer un movimiento de arriba para abajo con la polla y que lo había probado y era una pasada, algo que desconocía, cuando llegué a casa lo probé, y aluciné, recuerdo que al inicio no pasaba nada con que me parecía una tontería, luego llegas al orgasmo que por entonces desconocía la palabra orgasmo, igual que muchos amigo, recuerdo como sólo un amigo sabía que era y se burlaba de que no lo supiéramos.)

– ¿pero que dices?

Cierro la revista.

– ¡Eh no! venga va, hombre déjame.

– pero estás loco, es una guarrada y más en mi habitación, hazlo en tu casa, súbete los pantalones

Le tiro los pantalones para arriba, el me coge la revista.

– Venga hombre déjame, que hace mucho tiempo que no lo hago.

– ¡Que lo hagas en tu casa!

– no puedo, me pueden pillar.

– pues métete en el lavabo y te encierras con el pestillo.

– en mi casa no tenemos.

– ¿a no? y si estás cagando te pueden abrir la puerta.

– Si.

– ah…

– Venga déjame.

– ¡Que no hombre!

– joder, pero si Paco (nombre ficticio) me dejó pelarmela en su casa.

– ¡Pues te vas a casa de Paco! ¡Pero en mi casa no!

Intenta coger la revista, pero al final la vuelvo a guardar, mi amigo se vuelve a bajar los pantalones, el muy salido.

– ¡Pero que no te masturbes en mi casa!

– Será un momento.

Lo agarro, y lo arrastro hasta la puerta de mi casa.

– ¡Que te he dicho que no!

Cierro la puerta.

Aunque parezca imposible os juro que es cierto, imaginaros en esa edad si además de no poder hacerte pajas, no ligas, ¡Un problemón! después llega la época de la disco, si tienes mala suerte como yo, te coincide la época escolar y la disco con granos en la cara, como mínimo de los 15 a los 20 años era un grano de arroz con patas, eso en parte me ayudó para recluirme en mi casa, leer, pensar, observar, y conocerme mejor a mi y los demás, pero por lo general, están todos los jóvenes intentando que el pelo le quede bien engominado, (que también pasé por esa etapa los granos no me libraron) preocuparte al ver que no ligas ni los cordones de los zapatos, etc, para que cuando tengas 30 años, tu vida no tenga nada que ver con la de tu infancia, dándote cuenta que eso era un juego de tonterías sin importancia, un tiempo que has desaprovechado, que esos años donde hacías lo que te daba la gana podías haber invertido el tiempo en aprender, en leer más, conocer muchas más cosas, conocer y hacer crecer los talentos, pero no, por norma general, lo que teníamos que hacer de jóvenes lo hacemos de mayores, ¿Cuanta gente con 22 años aún no sabe que le gusta, que quiere hacer o para que vale o empiezan a descubrir que es lo que les gusta además de la disco, los porros y las pajas?

Una vez hice un programa de TV donde hacía debatir a una clase entera alrededor de un tema, sexo, guerra, drogas, etc, pero antes de empezar siempre hacía la misma pregunta a los jóvenes que estaban a punto de terminar el Bachillerato para hacer una carrera o a los alumnos de 4 de E.S.O. que tenían que escoger una especialidad de Bachillerato para encaminar su profesión.

¿Las personas que sepan en que quieren trabajar o que carrera estudiar que levanten la mano?

De 30, por lo general solo 5 o menos personas levantaban la mano, se sentían seguras de a que querían dedicarse o estudiar, pero seguramente que si hubiera pedido que levanten la mano cuantas personas saben a que discoteca irán esta noche o incluso durante el año el 95% la levantarían, porque durante la semana eso es más importante, nos ocupa más tiempo en nuestra cabeza la discoteca, el culo de la chica gimnasta o los porros, antes que preguntas sobre quienes somos, que necesitamos, que sabemos hacer, que nos gusta…

Lo triste es que una vez somos mayores la cosa tampoco cambia mucho. El profesor de la viñeta no creo que sea muy diferente al alumno.

Y me gustaría haber terminado con esta última frase, pero para no tener mal entendidos me gustaría aclarar un par de puntos.

1.- masturbarse no es malo, mastúrbense (pero no en mi casa), es sano, varios estudios lo aconsejan, ayuda a relajarse, y también aprenderán a conocerse, una vez tienes relaciones sexuales eso ya es un punto a favor para gozar aún más. Y no les hagan creer a los niños que eso es feo, ¡por favor! esas personas que dicen que es feo seguro que se hartan de masturbarse en su casa. Si la masturbación es perseguida lo que crean son bandadas de alumnos masturbándose en los patios y clases, eso o es que no encuentran otra manera de sacar al exterior lo que no les dejamos expresar.

2.- Escuela, padres o quién sea, no dejen que lo niños se llenen la cabeza de tonterías, sobre ligar, granos, etc, y hagan entenderles que tienen unos maravillosos años para aprender infinidad de cosas que de mayores les ayudarán a vivir mejor y entonces podrán perder el tiempo en ligar, en que gomina o discoteca ir o pensar porque no ligan, aunque seguramente que si de pequeños han aprendido, de mayores, ligar o la gomina no va a ser el principal pensamiento ni preocupación.

Feliz eyaculación, mientras, sigo ordenando la casa a ver que más recuerdos me vienen.

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