Estos días me han recetado varias medicinas, lo normal si no fuera por este gran avance en la medicina que me topé de golpe, ¡Plaf! ¿¡¡No!!!? ¿tanto han conseguido avanzar los médicos?
¡Una receta escrita con el ordenador! ¿Dónde se ha visto tal proeza? Fue la hazaña de un Oto-rino-laringólogo que seguramente ha venido del futuro, tenía unas máquinas extrañas…mmm…
De todo el mundo es conocido y sufrido las recetas a mano de los médicos, sin ir más lejos el dentista que me arrancó una muela hace escasos días da ejemplo de la falta de buena ortografía:
Espero que no me lea porque me va a dejar sin dientes:
-aaahgggrr
-uy, perdón, se me fue el bisturí ¿Escribo bien ahora? jejeejejejjajajajJUJUJU
Vale, tenéis razón esto no tiene nada que ver con médicos 2.0 pero creo que el cambio que tuvo para los ciudadanos el paso de la web 1.0 a la web 2.0 es similar al cambio que tendría que los médicos pasaran de escribir a mano a ordenador, los ciudadanos empezaríamos a tomar las medicinas correctas, existiría una comunicación real con el médico, un feedback, ahora para entenderlos necesitamos estudiar signos antiguos.
Bromas a parte, google a anunciado un servicio médico para almacenar nuestro historial médico Google Health, conectado con los hospitales y totalmente privado, un servicio que tendría que existir hace tiempo y creado por el estado, estoy harto de que los médicos pregunten por si alguna vez he tenido alguna enfermedad, alérgia o cualquier problema, te preguntan de todo como si apenas hubieras nacido, cuando muchas veces ni yo mismo lo recuerdo, o que el historial de vacunas lo tenga en un papel perdido en el algún rincón de mi casa, no quieras aventurarte a conseguir otro, y aún más ridículo ir a un hospital y que te contesten que no pueden ver tu historial porque es fiesta.
El servicio de google es un gran avance, imagínate que tienes un accidente, al instantes una persona autorizada puede leer que tipo de sangre tienes o si eres alérgico, unos datos que tendría que tener el nuevo dni digital de España, pero no, no se hagan ilusiones, yo lo tengo y fuera de la pijada de identificarte con la huella dactilar, poco más hay.
Por cierto mi nariz ya no es virgen, el Oto-rino-laringólogo me la violó con su máquina del futuro, me anestesió el recto de la nariz y seguidamente me metió un tubo con una cámara hasta el cuello, todo en un plis, no tuve tiempo ni de decir ¡Acción!
